El ​Dr. Jeffrey L. Fannin conoció PSYCH-K® a través de una enfermera, cuando Jeff estaba abriendo una nueva clínica y estaba enseñando a médicos y enfermeros a usar los artefactos para trabajar sobre los cerebros de los pacientes. Esta enfermera le comentó que existía una herramienta que se llamaba PSYCH-K®, que se usaba para reprogramar el subconsciente. Jeff no había oído hablar nunca de PSYCH-K® pero se interesó cuando la enfermera le dijo que producía cambios a nivel cerebral en las personas que ella lo había podido comprobar por sí misma y también había visto cambios en otras personas.

¿A quién no le ha pasado? Esa sensación de vivir corriendo tras logros materiales, un ascenso en el trabajo,… y cuando se consigue el logro…Zas! ¡Todo pierde sentido! El vacío sigue allí, parece imposible de llenar…y por eso volvemos nuevamente a correr tras otra cosa, si antes fue un nuevo auto, ahora será un viaje que no podemos dejar de hacer, una nueva pareja, etc.

Y así como en una interminable rueda, el vacío continúa allí, no hay cosas, lugares o personas capaces de llenarlo. Los pensamientos, sensaciones, emociones continuarán allí, como si nada hubiese sucedido, ¡tenemos la sensación de dormir con el enemigo!

En nuestra sociedad occidental, desde hace mucho tiempo hemos vivido en el paradigma de que los conocimientos y saberes están compartimentados, y eso en un cierto punto nos ha sido de mucha utilidad. Es una manera de ver el mundo, que nos ha permitido extraordinarios avances.

En los actuales sistemas de salud, este paradigma es el que predomina, nos hemos acostumbrados a tratar los síntomas que se expresan en nuestro cuerpo por partes, lo que, desde mi punto de vista, nos hace perder ese enfoque holístico, que nos permite vernos como un todo, mente-cuerpo-espíritu.